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Akelarre

comentario de artemisa

mujeres, es un honor haber participado con ustedes... Dónde obtuvieron el poema? Me sorprende un poco porque es inédito. Puedo hacerle un comercial a mi grupo de escritoras??? Así se inscriben e intercambiamos
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Besas!

Calendario lunar Febrero 2007

Calendario lunar Febrero 2007

Jabón de glicerina

Jabón de glicerina

Elaboración del jabón de glicerina.

<>Por: Luis Enrique Tavecchio.

Ingredientes:
Aceite de Coco........20%
Ácido esteárico........10%
Aceite de Ricino.......10%
Lejía (33%).............15%
Azúcar....................20%
Agua......................10%
Alcohol 96º .............15%

Para empezar yo uso estearina. No se si es lo correcto, pero me consta que sirve, igual que sirve el sebo. Como veis las grasas solo son el 40% del asunto.

El proceso original requiere de una olla grande con agitador y temperatura constantes. Además requiere lotes grandes. Yo he adaptado una versión doméstica para experimentar, pero cuanto más grande es un lote menor es el margen de error al pesar.

Entonces si nos sabemos como mínimo las *normas básicas de seguridad podemos empezar.

Supongamos un lote de 2Kg:

Pesamos las grasas 400gr de coco, 200gr de ricino y 200gr de esteárico. En mi caso uso estearina. Las calentamos al baño maría hasta hacerlas líquidas.
Mientras, se puede ir mezclando la lejía. La lejía es al 33%. Entonces cogemos 100gr de sosa y 200gr de agua y las mezclamos en una jarra de esas pirex. Cuando está bien disuelta, la mezclamos con las grasas poco a poco y removiendo. Aquí hay una sorpresita. Esto se saponifica instantáneamente. Se pone duro como un cuen-no a no ser que esté todo muy caliente (70-80º C). Entonces hay que menear hasta que todo esté homogéneamente mezclado. Lo ideal es removerlo lo más posible durante las siguientes dos horas. Cada 20 minutos durante 5 o algo así (por eso lo de la termomix). El resto de estas dos horas es como el proceso en caliente. Luis insiste que la agitación debe de ser lo más constante y homogénea posible. También recalca que el control de la temperatura es importantísimo.

Cogemos el azúcar (400gr), lo pesamos en un bote de cristal y le agregamos los 200gr de agua caliente. Mezclamos y al final se disuelve. Se puede acelerar en el microondas pero si se calienta demasiado se oscurece (se pone amarillo). Esto hacerlo al principio o el día antes por que tarda bastante en disolverse.

El alcohol hay que trabajarlo lejos de cualquier llama. El vapor de alcohol (emana a 80º) es explosivo y muy chungo de respirar (mascarilla plis). O sea que no os digo más.
Sabiendo esto, cogemos el alcohol (300gr), lo pesamos y lo ponemos a parte tapadito.

Al menos dos horas después, pasada la fase de gelificación y la de champagne que no es tan evidente, añadimos el azúcar a 60º C, poco a poco y removiendo hasta hacer de todo eso una masa homogénea. Lo de antes debía estar durísimo, ahora con el azúcar líquido la cosa se suaviza bastante (se puede remover vamos).

Entonces una vez todo muy bien mezclado, apagamos la llama y le añadimos el alcohol, mezclando suavemente. Disolver esto no es tan sencillo, pero se disuelve.

Entonces viene la prueba de la fenolftaleina. Para hacer esta prueba hay que tener una solución de fenolftaleina en alcohol al 0,1%. Es barato y fácil de encontrar.
Sacamos una parte de una cucharada del jabón y le añadimos tres gotas de la solución. Debe ponerse de un color rosa débil. Si no se pone de ningún color es que nos hemos quedado cortos de sosa. Le podemos añadir unas gotas más de lejía al jabón y remover hasta que resulte el experimento. Si se pone de un rosa muy intenso (fucsia o magenta) es que nos hemos pasado de sosa. Se puede corregir con una solución de ácido cítrico al 20% hasta que salga el experimento. Es decir, el punto se le pilla a ojo.

Ahora tenemos el jabón totalmente transparente y si lo dejamos de remover se solidifica una fina capa en la superficie muy rápido. Esto se cuela y se vierte en moldes. Si queremos le ponemos ya el aroma y el color y listo. Si no queremos usarla aun la dejamos enfriar. Esta base se derrite mejor que cualquiera que compres y podrás “aliñar” tu jabón después. Creo que además, cuando lo re-derrites se hace más transparente.

Desde que tengo esta receta he hecho muchas pruebas y como soy así, he probado a variar la receta agregando otros aceites. Con oliva (además de lo de antes) me ha ido muy bien. Por ejemplo sumando a lo anterior 300gr de aceite y su correspondiente sosa.

Como os he dicho esto se encoge luego. Pero ahora viene lo curioso. Cuando se enfría este jabón no es tan transparente, pero al cabo de unos días, cuando va perdiendo el alcohol, entonces es más transparente. He probado a echar menos alcohol y sustituirlo en parte por glicerina y parece que encoge menos. También es menos transparente.

Un detalle, este jabón tiene un sobre-engrasado >20% Si nos pasamos de grasa, el jabón es menos transparente y pueden llegar a salirle manchas blancas de sebo no saponificado.

Os entrego mi preciado tesoro como en su día Luis me lo entregó (más o menos). Supongo que cuando lo probéis, comprenderéis por que se lo agradezco tanto.

*Normas de seguridad:

El paso más importante en la elaboración de jabón es la seguridad. Todas las indicaciones de las recetas deben seguirse siempre respetando las normas básicas de seguridad. Debe protegerse a usted mismo y utilizar los recipientes y los mezcladores adecuados para la seguridad de su familia y amigos. El tema más relevante en cuanto a las medidas de seguridad se refiere al uso de la lejía. Es un veneno si se ingiere internamente y puede provocar graves quemaduras en contacto con la piel o los ojos en forma sólida o líquida. También puede reaccionar con el aluminio, la hojalata y el cobre porque es corrosiva con estos metales. Además, disolver hidróxido de sodio sólido (lejía) en agua genera una gran fuente de calor, suficiente para hacer hervir el agua si la cantidad de agua es pequeña o si el agua ya está templada desde el principio. Los vapores que se desprenden cuando se añade hidróxido de sodio al agua son nocisvos, irritantes para los ojos y los pulmones, de modo que hay que trabajar en un lugar muy bien ventilado, a poder ser al aire libre y con el viento de espaldas si trabaja con un horno tradicional. Durante la adición de lejía al agua, la temperatura ascenderá casi al punto de ebullición del agua y saldrá vapor. Utilice siempre agua a temperatura ambiente o incluso agua de la nevera; las infusiones de hierbas calientes puden romper a hervir violentamente si intenta disolver lejía en ellas sin antes enfriarlas.

Utilice vinagre para neutralizar las pequeñas salpicaduras de lejía. En caso de contacto con la piel o con los ojos, aclare la parte afectada con abundante agua y, especialmente en caso de salpicaduras en los ojos, visite a un médico urgentemente.

1. Guarde el hidróxido de sodio (sosa cáustica o lejía) dentro de un recipiente hermético en un estante elevado. Pegue una nota muy clara en el recipiente y jamás lo deje al alcance de los niños ni de animales curiosos.

2.- Utilice siempre guantes de goma al trabajar con hidróxido de sodio, al mezclar el jabón y al desmoldar el jabón recién hecho.

3.- Utilice gafas protectoras al manipular o mezclar la solución de hidróxido de sodio y las grasas.

4.- No se frote los ojos conlos guantes de goma después de haber tocado el hidróxido de sodio.

5.- A medida que añada agua al hidróxido de sodio, saldrán vapores tóxicos. Aleje bién su cara de estos vapores mientras remueve la mezcla o, mejor aun, póngase un pañuelo tapándole la nariz. Estos vapores durarán unos minutos. Trabaje siempre en un lugar ventilado.

6.- No deje el hidróxido de sodio o las mezclas destapados o abandonados.

7.- No ingiera la mezcla de jabón.

8.- No pruebe su nuevo jabón hasta que transcurran cuatro semanas completas.

9.- Cuando fabrique jabón, tenga siempre a mano una botella de vinagre que usará para lavar la zona afectada con vinagre y enjuagarla posteriormente con abundante agua.

10.- Cuando tenga que limpiar la olla del jabón, deje que se endurezca la mezcla, luego raspe los restos y échelos en una bolsa que deberá cerrar bien y depositarla en la basura. Añada vinagre al agua de lavar los platos y lave los utensilios con líquido lavavajillas pero usando guantes de goma.








 

Cómo reciclar botellas de vidrio?

Cómo reciclar botellas de vidrio?

Se necesitan botellas de vino, licor, ron, etc de vidrio

Aceite quemado de coche (se consigue en los talleres mecánicos)

Una barra de hierro de 5 a 10 mm de diámetro y aprox. 30 cm de largo (se puede conseguir donde venden material para soldar o en los tiraderos de fierro viejo).

un trapo

Se marca la botella con un plumon indeleble en donde se desee cortar (para hacer vasos más o menosa la mitad de la botella) se llena la botella de aceite hasta la marca. Se calienta la barra hasta que esté al rojo vivio. Hay que agarrar la barra con un trapo grueso para no quemarnos. Cuando ya esté al rojo vivio se introduce inmediatamente en la botella con el aceite y en unos segundos se corta al nivel máximo de aceite. Tener cuidado de no desparramar.

Después cuando el vaso ya está limpio se lija la orilla filosa con una lija de agua hasta quitar el filo por comlpeto

Nota: Es importante tener cuidado al manipular la botella ya cortada porque los bordes quedan muy filosos.

Fuente: http://www.portonartesano.com.ar

Mitos y Verdades acerca de la soya o soja.

Mitos y Verdades acerca de la soya o soja.

Nota: A pesar de que por todos lados vemos que la soya es un alimento que aporta muchos beneficios alimenticios y a nuestra salud y se vende por todos lados en las tiendas naturistas y como un producto alternativo, aquí hay una artículo interesante sobre los mitos y verdades de la soya. Es importante tener en cuenta que aunque el comercio alternativo sea más justo y ofrezca productos de mejor calidad para el beneficio de nuestra salud, nuestra alimentación y con el medio ambiente, no deja ser comercio y probablemente se usen los mismos medios para vender como es el de la publicidad ¿Quién sabe?. Por si las dudas vale la pena averiguar sobre las ventajas y desventajas de todo lo que consumimos. De por sí no hay que creer todo lo que leemos y vemos.

Leí por ahí que es bueno consumirla pero después de ser procesada...

Mitos y Verdades acerca de la Soya

Traducción española de Pilar Bastida

Mito: El uso de la soya como alimento data de muchos miles de años atrás.
Verdad: La soya fue recién introducida como alimento durante la tardía dinastía Chou (1134-246 AC), solo después que los chinos aprendieron a fermentar los frijoles de soya para hacer alimentos como tempeh, natto y tamari (salsa de soya).

Mito: Los asiáticos consumen grandes cantidades de alimentos producidos de soya.
Verdad: El consumo promedio de soya en Japón y China es de 10 gramos (cerca de 2 cucharitas) por día. Los asiáticos consumen alimentos preparados con soya en pequeñas cantidades como condimento, y no como un sustituto por alimentos de origen animal.

Mito: Los alimentos modernos de soya confieren los mismos beneficios para la salud que los alimentos tradicionales de soya que eran naturalmente fermentados.
Verdad: La mayoría de los productos modernos de soya no son fermentados y, por lo tanto, no neutralizan las toxinas presentes en los frijoles de soya. Además, son procesados de tal forma que la proteína es desnaturalizada y el nivel de carcinógenos es incrementado.

Mito: Los alimentos de soya proveen de proteína completa.
Verdad: Como todas las legumbres, el fríjol de soya es deficiente en aminoácidos que contienen sulfuro. Adicionalmente, el procesamiento moderno desnaturaliza la frágil lisina.

Mito: Alimentos preparados con soya fermentada proveen de vitamina B12 en dietas vegetarianas.
Verdad: El compuesto que se asemeja a la vitamina B12 en la soya no puede ser utilizado por el cuerpo humano; de hecho, los alimentos con soya hacen que el cuerpo requiera de mas vitamina B12.

Mito: La formula para infantes basándose en soya no es peligrosa.
Verdad: Los alimentos hechos a base de soya contienen sustancias como tripsina que inhiben la digestión de proteínas y afectan la función pancreática. En estudios con animales, dietas altas en tripsina conllevaron a un retardo en el crecimiento y a desórdenes pancreáticos. Los alimentos hechos a base de soya también incrementan la necesidad del cuerpo por vitamina D, necesaria para huesos fuertes y crecimiento normal. El acido fítico en el fríjol de soya resulta en una biodisponibilidad reducida de hierro y zinc, requeridos para la salud y desarrollo del cerebro y el sistema nervioso. La soya carece también de colesterol, esencial para el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso. Las grandes cantidades de fitoestrogenos en la formula de soya han sido implicadas con la tendencia actual de desarrollo sexual prematuro en las niñas y de desarrollo sexual retardado en los niños.

Mito: Los alimentos hechos a base de soya pueden prevenir la osteoporosis.
Verdad: Los alimentos hechos a base de soya pueden causar deficiencias en calcio y vitamina D, ambas necesarias para tener huesos saludables. El calcio proveniente de caldos preparados con huesos, y la vitamina D proveniente de mariscos, manteca de cerdo y órganos, son los que previenen de osteoporosis a la población en Asia – no la soya.

Mito: Los alimentos modernos hechos a base de soya protegen contra varios tipos de cáncer.
Verdad: Un informe del gobierno británico concluyó que existe poca evidencia de que los alimentos de soya protejan contra el cáncer al seno u otra forma de cáncer. De hecho, la soya puede resultar en un incremento del riesgo de cáncer.

Mito: Los alimentos hechos a base a soya protegen contra enfermedades del corazón.
Verdad: En algunas personas el consumo de soya reduce su colesterol, pero no existe evidencia de que reduciendo el colesterol se reduzca el riesgo de tener enfermedades del corazón.

Mito: Los estrógenos de la soya (isoflavonoides) son buenos para usted.
Verdad: Los isoflavonoides de la soya interfieren con el funcionamiento endocrino. Pueden prevenir la ovulación y estimular el crecimiento de células cancerosas. El consumir solo 30 gramos (como 4 cucharas) de soya al día puede resultar en hipotiroidismo con síntomas de letargo, estreñimiento, aumento de peso y fatiga.

Mito: Los alimentos hechos a base de soya pueden prevenir la osteoporosis.
Verdad: Los alimentos hechos a base de soya pueden causar deficiencias en calcio y vitamina D, ambas necesarias para tener huesos saludables. El calcio proveniente de caldos preparados con huesos, y la vitamina D proveniente de mariscos, manteca de cerdo y órganos, son los que previenen de osteoporosis a la población en Asia – no la soya.

Mito: Los fitoestrogenos en la soya mejoran la habilidad mental.
Verdad: Un estudio reciente encontró que mujeres con los mayores niveles de estrógeno en la sangre tenían los menores niveles cognitivos; el consumo de tofu en los japoneses-americanos de edad media está asociado con la ocurrencia de la enfermedad de Alzheimer conforme van envejeciendo.

Mito: Los isoflavonoides y la proteína aislada de la soya tienen GRAS status, lo que significa que se les reconoce como productos que no son perjudiciales.
Verdad: Recientemente, Archer Daniels Midland retiró una aplicación al FDA solicitando GRAS status para los isoflavonoides de la soya, debido a la reacción de protesta de parte de la comunidad científica. El FDA (Agencia Reguladora de Alimentos en USA) jamás aprobó un GRAS status para la proteína aislada de la soya, debido a la preocupación que existe respecto a la presencia de toxinas y carcinógenos en la soya procesada.

Mito: La soya es buena para su vida sexual.
Verdad: Numerosos estudios con animales han mostrado que los alimentos a base de soya causan infertilidad en los animales. El consumo de soya promueve el crecimiento de pelo en los hombres de edad media, lo que indica menores niveles de testosterona. El tofu era consumido por los monjes budistas para reducir el libido.

Mito: Los frijoles de soya son buenos para el medio ambiente.
Verdad: La mayoría de los frijoles de soya que se cultivan en los EEUU están genéticamente manipulados para permitir que los granjeros puedan utilizar mayores cantidades de herbicidas, incrementando la emisión de toxinas.

Mito: La soya es buena para países en vías de desarrollo.
Verdad: En los países del tercer mundo, la soya reemplaza cultivos tradicionales y transfiere el valor agregado del procesamiento de la población local a las corporaciones multinacionales.

Mito: Los alimentos a base de soya son beneficiosos para mujeres que se encuentran en sus años postmenstruales.
Verdad: Los alimentos a base de soya pueden estimular el crecimiento de tumores dependientes de estrógeno y causar problemas en la tiroides. Un funcionamiento bajo de la tiroides esta asociado con dificultades en la menopausia.

http://www.westonaprice.org/splash_2.htm

 

Pilas y Baterias. Muy Tóxicas!

Pilas y Baterias. Muy Tóxicas!

Todo tipo de pilas y baterias, por su composición, resultan especialmente tóxicas y peligrosas para el medio ambiente, especialmente aquellas que contienen cadmio (pilas recargables) o mercurio (la mayoría de las pilas botón, pilas alcalinas y de óxido de plata), aunque también son preocupantes otros metales como el manganeso, níquel y cinc.Entre los tipos de baterias más conocidos y utilizados encontramos: - pilas botón- pilas cilíndricas o prismáticas (recargables o no)- baterías de telefonía móvil y de videocámarasLos compuestos químicos que se utilizan para generar su energía son metales pesados, como el cadmio, mercurio, etc. El peligro se presenta al terminar su vida útil. Los metales mezclados con el medio ambiente contaminan el agua, y el aire. Muchas veces son enterradas o quemadas con los demás desechos: en el caso de la incineración, al quemarse se producen elementos tóxico que contaminan el aire. Al enterrarlos, además de que tardan muchísimos años en desintegrarse, emanan sustancias peligrosas que se contaminan el suelo, las bacterias, las plantas y el agua subterránea. Las pilas que se tirar a la basura acaban oxidándose en los vertederos, liberandose el mercurio que contienen y contaminando así suelos y aguas. También puede llagar a convertirse en metilmercurio, un compuesto altamente tóxico.La recogida selectiva de las pilas es de una gran importancia, por lo que debemos exigir la existencia de contenedores específicos repartidos por zonas estratégicas y bien visibles de nuestra ciudad.Cuando se realiza la recogida de esas pilas, se procede a la separación del mercurio en las plantas de reciclaje. El proceso requiere la trituración de la pila, excepto en el caso de las pilas botón, y se introducen en un destilador que se calienta hasta la temperatura adecuada. La condensación posterior permite la obtención de un mercurio con un grado de pureza superior al 96%. De la trituración de las pilas normales se obtiene escoria férrica y no férrica, papel, plástico y polvo de pila. Este último debe seguir distintos procesos para recuperar los metales que contiene.Todo este proceso requiere un elevado consumo de energía y los tratamientos posteriores para recobrar el resto de componentes exigen una elevada inversión económica no siempre recuperable. Por ello las pilas tambien se destruyen mediante incineración (desprendiendose polvo de cadmio, mercurio y cinc) o se disponen en un vertedero controlado (relleno). En cuando a los vertederos, es imprescindible asegurar su estanqueidad para evitar filtraciones indeseables tanto al suelo como a las aguas, mediante láminas impermeabilizantes, lechos de cal y sistemas de recolección de filtraciones.El mejor reciclaje es la prevención, emplear pilas recargables y la utilización de electricidad o la energía solar.

¿CÓMO CONSTRUIR UN HORNO SOLAR?

Vamos a construir una cocina solar denominada «30-60» porque su cara delantera puede colocarse en dos inclinaciones diferentes. El ángulo 60º es ideal para captar la radiación cuando el sol está bajo sobre el horizonte (invierno). La posición de 30º sirve para captar los rayor solares cuando provienen de mayor altura (verano).

l 30-60 es un horno solar del tipo caja caliente. Consiste en una caja bien aislada térmicamente con su cara delantera transparente, que se utiliza como puerta del horno. El interior se pinta de negro mate para que la luz solar sea absorbida al máximo por la paredes del interior. Le dotaremos de unos reflectores planos para captar mayor cantidad de radiación y mandarla al interior de la caja caliente. Mediante estos detalles conseguiremos que este captador solar sea una trampa de calor muy efectiva. En su interior se alcanzarán temperaturas del orden de los 130º C, más que suficientes para cocinar alimentos lentamente.

El cuerpo del horno
Vamos a diseñar los laterales del horno, debemos dibujar sobre la madera chapeada las piezas de forma que lo que luego será la boca del horno esté inclinada adecuadamente.Lo más importante es que se forme un triángulo rectángulo cuya hipotenusa esté comprendida entre dos ángulos de 30 y 60 º respectivamente.

Cortamos las puntas del triángulo en sus dos ángulos de 30 y 60º, y los repasamos con lija para que se igualen. Estas medidas son adecuadas para introducir una olla de 5 litros. A continuación cortaremos 5 listones de 40 x40 mm a 48 cm de largo; usa la caja de ingletar para que los bordes queden a escuadra. Ahora clávalos con los laterales de contrachapado, formando el esqueleto (fig.1). Clava más de un clavo en cada unión para que no giren. Ha de quedar un esqueleto rígido y sólido.

Medimos las caras y hacemos las tapas con okúmen. La cara delantera quedará libre para colocar la puerta. Os recomiendo aplicar a los listones correspondientes cola de carpintero antes de clavar las tapas. Así quedará más sólido y herméticamente cerrado.

Para aislar térmicamente las paredes del horno, usaremos varias capas de cartón ondulado limpio pues comeremos lo cocinado en el interior. Mediremos los 6 huecos y haremos una plantilla de cada uno, cortando varias planchas de cartón iguales. Coloca una sobre otra con cola de carpintero hasta llegar a la altura de los listones (40 mm), unas 4 ó 6 capas en cada hueco. La última capa la forraremos con papel de aluminio, ayudándonos de una brocha y cola blanca rebajada con agua. El interior del horno habrá de quedar forrado con aluminio reflactante, con la cara más luminosa a la vista, no importando que queden arrugas o bolsas de aire.

La puerta del horno
Para confeccionar la puerta de cristal primero haremos el marco con 4 listones de 40 x 20mm. Las medidas de esa puerta serán 2 cms menores que el marco delantero del horno. De esta manera quedará un cerco sobre la puerta donde instalar los reflectores.

Corta 2 listones de 48 cm y otros 2 de 47 y clávalos como muestra el dibujo (fig.2a) para formar un marco de 48 x 51 cm exteriores y una luz de 44 x 47.

Encola bien las juntas para que el marco quede fuerte. Para asegurar que la puerta queda bien encuadrada guíate con la escuadra de carpintero y clava unos listoncillos en las uniones para que sequen en buena posición. Cuando el marco esté rigido y seca la cola, coloca el cristal. Para ello clava 4 listoncillos de 10 x10 mm en el interior del marco y encólalos justo al ras de la que será la cara delantera de la puerta (fig. 2b). Dentro del marco y encima de estos listones fijaremos el cristal de la puerta del horno, mejor si es climalit. El cristal medirá 43 x 46,5 cm. Aplica un buen cordón de silicona trasparente sobre el bordillo formado con los listones, lugar que ha de estar muy limpio, y coloca el cristal. Sobre éste aplica otro cordón de silicona y clava otros 4 listoncillos, presionando sobre la silicona hasta que se distribuya por todas las rendijas. Pasadas 4 ó 5 horas ya se pueden eliminar los restos de silicona con ayuda del cutter.

Instalando la puerta del horno
Necesitaremos una bisagra de 47 cm de largo, cuyas hojas tengan 20 mm de ancho. Hay que centrar la puerta sobre el marco de manera que quede 1 cm alrededor de la puerta acristalada. Atornillaremos la bisagra en el lado que hayamos decidido, bien alineada con el listón correspondiente. Luego fija la otra hoja de la bisagra con tirafondos al marco del horno. Interesa que la puerta pueda abrirse y cerrarse fácilmente y que ajuste bien sobre la boca del horno. Colocaremos un burlete autoadhesivo de caucho en la puerta para que cierre herméticamente. Para cerrar el horno a presión, le instalaremos 2 cierres de carlota (fig. 3) en el lado contrario a la bisagra. El macho y la hembra han de colocarse bien alineados y a la misma altura. Para ello habremos de colocar unos taquitos de madera de 10 mm de grueso debajo de la hembrilla para elevarla. Para terminar colocaremos en la puerta un tirador bien centrado y no muy grande para que no proyecte su sombra sobre el horno.

Ya tenemos el horno solar, pero vamos a perfeccionarlo colocando en su interior una chapa metálica oscura que absorba la radiación y la transforme en calor útil. Usa pucheros oscuros para cocinar y haz una base metálica que proteja al horno de posibles manchas y malos olores.

Colocaremos la chapa en las dos posibles bases del horno. Emplea una chapa de aluminio, de latón o de hojalata de 0,5 mm de grosor y 39 x 62 cm de superficie. La marcaremos a 25 cm y la plegaremos a 90º con ayuda de unos listones y 2 apretadores. Esta chapa doblada tiene que encajar bien dentro del horno. La pintaremos de esmalte negro mate. Conviene dejarla suelta para fregarla cuando se ensucie.

Los reflectores
Los reflectores nos servirán para captar mayor área de radiación solar y enviarla al interior del horno. Tenemos que hacer un embudo cuya boca pequeña encaje alrededor de la puerta del horno. Los haremos, de acuerdo a las medidas de la fig. 4, con madera de contrachapado de 10 mm de grosor, forrada de hoja de aluminio de cocina, pegada con cola de carpintero rebajada con agua al 50%. Una vez secos, los pegaremos con tiras de tela vaquera o lona, usando cola de carpintero. Atento al orden, pues 2 reflectores tienen una medida y los otros 2 otra. Junta uno grande y uno pequeño con sus caras reflectantes enfrentadas y, alineando sus bordes en ángulo, los fijamos con unos apretadores a la mesa de trabajo (fig 5). Luego encolaremos un margen de 6 cm para colocar la tira de tela alrededor de las dos planchas formando una bisagra entre ambas.

Cuando los 4 reflectores estén secos, uniremos los 4 bordes restantes con sendas tiras de tela. Sigue los mismos pasos: doblar, fijar, encolar y pegar la tela. A continuación heremos encajar el embudo reflector en la puerta del horno. Verás que uno de los laterales tropieza con los dos cierres de carlota. Marca con un lápiz el lugar exacto y procede a recortarlo. No olvides colocar una manilla para transportar el horno justo encima del lado más alto, cerca de la puerta.

Cómo usar el horno 30-60
Colócalo orientado al sol donde no vaya a haber sombras durante unas horas. Lo mejor es poner primero el horno al sol para que vaya caldeándose mientras preparamos los ingredientes de la comida. Introduciremos los alimentos en un puchero negro u oscuro y, quitando el reflector, abriremos la puerta y meteremos dentro la olla. Luego, cerramos, colocamos el reflector y a esperar. Los recipientes pueden ser metálicos, de barro o esmaltados y si la tapa es transparente mucho mejor. Si hubiera sombras en el interior del horno, hay que moverlo lateralmente hasta que desaparezcan. Cada 20 ó 25 minutos podemos girarlo para que esté perpendicular al sol. Notaremos que la comida hierve cuando se condense agua en las esquinas del cristal interior. La comida se hará en el doble de tiempo de lo normal, alcanzando temperaturas hasta de 150 º gracias a los reflectores.
José Manuel Jiménez, «Super»
Ingenios Solares, Editorial Pamiela
Tfno: 948 14 21 93    

Material Necesario
      
    * 2 tableros de madera contrachapada de 10 mm. de grosor. Uno de 1,50 X 1 m. y otro de 1 X 1 m.
    * 1 plancha de madera de okúmen de 2 X 1 m.
    * 4 listones de 2,50 m. de largo de 40 por 40 mm.
    * 1 listón de 2,50 m. de largo de 40 por 20 mm.
    * Unas cajas de cartón ondulado que estén limpias para emplearlo como aislante térmico.
    * Una chapa metálica de 39 por 62 cm. y de 0,5 mm. de grosor, que sea fácil de doblar (aluminio, latón, hojalata...).
    * 4 ms. de cuadradillo de madera de 10 por 10 mm. (también sirve junquillo de cristalero de 1X1).
    * 1 vidrio de 43 por 46,5 cm. o un climalit de esas medidas.
    * Unas tiras de tela vaquera o lona de 10 cm. de anchas.
    * Un rollo de papel de aluminio del usado en la cocina.
    * Una tira de bisagra de piano de 20 mm. de ancha y 47 cm. de larga.
    * 2 cierres de presión tipo carlota.
    * 1 asa para transportar el horno y un pomo pequeño para la puerta.
    * 2 metros de burlete de caucho autoadhesivo.
    * Cola blanca de carpintero, silicona traslúcida anti-moho, clavos de varios tamaños y tirafondos.
    * Pintura negra mate.

Herramientas
      
    * Una sierra de marquetería, serrucho o caladora eléctrica.
    * Un transportador de ángulos.
    * Serrucho de costilla y caja de ingletear.
    * Una escuadra de carpintero y una regla de seguridad.
    * El cutter y las tijeras.
    * Una lima y papel de lija o lijadora eléctrica.
    * Martillo, apretador y destornillador.
    * Pistola de silicona y brocha para encolar y pintar.
    * Metro y lapicero.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
    

Energía Solar

Energía Solar

La energía solar es la energía obtenida directamente del Sol. La radiación solar incidente en la Tierra puede aprovecharse por su capacidad para calentar o directamente a través del aprovechamiento de la radiación en dispositivos ópticos o de otro tipo. Es un tipo de energía renovable y limpia, lo que se conoce como energía verde.

La potencia de la radiación varía según el momento del día, las condiciones atmosféricas que la amortiguan y la latitud. Se puede asumir que en buenas condiciones de irradiación el valor es superior a los 1000 W/m² en la superficie terrestre. A esta potencia se la conoce como irradiancia.

La radiación es aprovechable en sus componentes directa y difusa, o en la suma de ambas. La radiación directa es la que llega directamente del foco solar, sin reflexiones o refracciones intermedias. La difusa es la emitida por la bóveda celeste diurna gracias a los múltiples fenómenos de reflexión y refracción solar en la atmósfera, en las nubes, y el resto de elementos atmosféricos y terrestres. La radiación directa puede reflejarse y concentrarse para su utilización, mientras que no es posible concentrar la luz difusa que proviene de todas direcciones.

La irradiancia directa normal (o perpendicular a los rayos solares), fuera de la atmósfera recibe el nombre de constante solar y tiene un valor medio de 1354 W/m² (que corresponde a un valor máximo en el perihelio de 1395 W/m² y un valor mínimo en el afelio de 1308 W/m².)

    * Energía solar pasiva: Aprovecha el calor del sol sin necesidad mecanismos o sistemas mecánicos.
    * Energía solar térmica: Para producir agua caliente de baja temperatura para uso doméstico sanitario y calefacción.
    * Energía solar fotovoltaica: Para producir electricidad, en placas de semiconductores que se excitan con la radiación solar.
    * Energía solar termoeléctrica: Para producir electricidad con un ciclo termodinámico convencional, a partir de un fluido calentado por el sol.
    * Energía solar híbrida: Combina la energía solar con la combustión de biomasa o combustibles fósiles.
    * Energía eólico solar: Funciona con el aire calentado por el sol y que sube por una chimenea donde están los generadores.